domingo, 28 de enero de 2018

JUSTINE O LOS INFORTUNIOS DE LA VIRTUD. MARQUES DE SADE.


      Justine es una obra que comparte dos características de difícil equilibrio: es hija de su tiempo y adelantada de la modernidad. Publicada en 1791, fue la primera obra de Donatien Alphonse Françoise de Sade que vio la luz pública. Fue como una certera puñalada en el corazón de los valores e ideas del Antiguo Régimen, pero al mismo tiempo tuvo el efecto de despertar los recelos, cuando no el estupor, de la burguesía constructora del Nuevo. Ateismo y materialismo, dos de las ideas inspiradoras del movimiento revolucionario, llevadas a través de la expresión perversa de Sade, a límites que aún hoy son causa de inquietud hasta para eso que llamamos “mentalidades abiertas”. Sin duda esta obra supone la materialización de la ruptura ideológica del Siglo de las Luces reinterpretada por un filósofo profundo, pesimista, desquiciado y perseguido de forma paranoica por el Poder encarnado en la persona de Napoleón I.
 
       Y sin embargo, es una obra moralizante... Su temática es la eterna lucha entre el Bien y el Mal, no como conceptos puros, sino a través de su concreción moral, como confrontación entre la Virtud y el Vicio, la recompensa de una y el castigo del otro. Su perversa peculiaridad estriba en la inversión de los principios cristianos, de los valores imperantes. El Vicio triunfante por doquier y la Virtud escarnecida. De nada sirven los preceptos religiosos y tanto ricos como pobres, monjes o contrabandistas, prostitutas como aristócratas, salteadores de caminos o burgueses, hacen gala de un desprecio ilimitado hacia Dios, la Pureza, la Bondad. Así, la Dubois –ladrona y meretriz- aconseja a Thérèse-Justine: “Deja de lado la justicia divina y sus castigos y recompensas futuros. Todas esas estupideces solo sirven para que nos muramos de hambre. ¡Oh Thérèse, la dureza de los ricos legitima la mala conducta de los pobres.!”.

        Todos los torturadores de la pobre y virtuosa Justine justifican sus acciones desviadas y su maldad hacia ella a través de una filosofía natural, atea, en la que el débil debe sucumbir para majestad del fuerte. Este es el único mandato: “Lobos que comen corderos, corderos devorados por lobos, el fuerte que sacrifica al débil, el débil la víctima del fuerte. He aquí la Naturaleza, sus puntos de vista, sus planes; una acción y una reacción eternas, una muchedumbre de vicios y virtudes. En una palabra, un perfecto equilibrio que resulta de la igualdad del bien y del mal sobre la tierra; equilibrio esencial para el mantenimiento de los astros, de la vegetación, y sin el cual, todo sería destruido en un instante.”


      Sobre este trasfondo filosófico se suceden las desgracias que acosan a Justine desde las primeras páginas de la obra. Y cuando el desenlace de la misma parece que va a reinstaurar el orden moral en el mundo y la Bondad va a ser reivindicada y premiada, ¡Zas!, un rayo acaba con la vida de la infortunada Justine. 

      Pese a todo, Sade ofrece una última concesión a la esperanza (o a la censura), y permite que Juliette –la licenciosa hermana de Justine-, reniegue de su vida de excesos y abrace el camino de la virtud y el recato. Pero el equilibrio resulta escandalosamente inestable: 354 páginas de triunfo y regodeo del mal y una sola página de tímidos atisbos de bondad y arrepentimiento. No parece sino un apresurado final edificante concebido con el fin de hacer tolerable la novela a la hipócrita sociedad francesa de la época.



         

G DE GASTRONOMÍA

Enrique López Gosálbez

       Una de las constantes culturales de las sociedades humanas es la de establecer una profunda relación entre el erotismo y el lenguaje culinario (¿Qué os había dicho?). En estos menesteres simbólicos, la len­gua castellana resulta ser especialmente fecunda, de manera que los hispanohablantes podemos disfrutar de un vasto registro de expresio­nes populares referidas a la rela­ción emblemática entre el sexo y la comida. Reflexionemos sobre ello.

Sin duda, una de las que goza de mayor popularidad entre nosotros es la de "comerse una rosca", que hace referencia al simple hecho de mantener rela­ciones sexuales. Se come una rosca o un colín quien consigue compañía sexual. Obviamente, el acto de comer parte de un estado caren­cial: el hambre. No es de extrañar por tanto, que aludamos al deseo sexual en términos de hambre. Tener hambre de sexo. "Saciar el apetito concu­piscente", que diría un cursi.

Pero claro, todo deseo supone un objeto deseable, un manjar apetecible. "estás para comerte", piropeamos, con airecillo antropofágico.  No obstante, como bien demuestra el sutil arte de la gastronomía, sobre gustos no hay nada escrito y en la erótica, esta norma general se convierte en regla de oro: "ser un bom­bón", “estar como un queso”, "estar más buena/o que el pan”. Estas relaciones simbóli­cas entre ciertos alimen­tos y el sexo las hemos establecido atendiendo no sólo a las supuestas o evidentes similitudes morfo­lógicas con el cuerpo y sus zonas erógenas, sino que han quedado fijadas en nuestro inconsciente merced a la trasposición de una experiencia fruitiva y sensual en la que se entrelazan los colores, la textura, el sabor y los aromas junto a los sentimientos, emociones y fantasías que ciertos alimentos despiertan en nosotros. Las posibilidades son tan variadas como abundante  la despensa, así que os sugiero que cojáis el capazo y me acompañéis a dar una vuelta por este voluptuoso mercado.

El concepto católico de lo carnal como expresión de sensualidad es enormemente evocador. No resulta insólito que el sexo y la carne estén íntimamente asociados en nuestro inconsciente como términos homólogos. “Pegarse el filete”  llamábamos al sensual ejercicio de explorar la cavidad bucal del otro. Tenemos, como no, al inefable “conejo” de mullida y sedosa piel que hiciera las delicias del novio de la Loles y a la “salchicha”, la “longaniza” o “el chorizo” , trasuntos visuales y simbólicos del pene y su  ardua fisiología.


Los vege­tarianos y aficionados a las vita­minas de las frutas pueden optar por las distinguidas fresas o el más popular higo. También contamos con el humilde nabo y con  la seta. De igual manera, la lengua valenciana disfruta de la deliciosa manzana, símbo­lo del pecado original, la poma (curiosamente no encontramos tal analogía en la lengua castellana aunque si en la francesa).  A esta apresurada relación de vegetales asociados al sexo podemos añadir los melo­nes, los cocos, la pepitilla, la breva, el pepino, la banana, la chirivía, el chocho (el popular altramuz), el cebollino, la cebolleta y muchos otros.

Los paladares sibaritas siempre han gus­tado del marisco. No es de extra­ñar por tanto que los genitales femeninos (objeto-manjar) estén llenos de exquisitas reminiscencias mari­neras: el mejillón, la almeja y la ostra son buena prueba de ello. Es bien fácil de entender el carácter alegórico de los moluscos bivalvos porque todo en ellos es sexualmente evocador. Y cómo no mencionar al percebe (¿sabían que su pene excede en varias veces la longitud de su cuerpo?), al mediterráneo “mabre” o al incordiante pulpo de múltiples extremidades largas y resbaladizas o tentáculos, (no derivará acaso este término de la ociosa y vil costumbre de tentar culos a diestro y siniestro).

En esta relación apresurada, no puede faltar la repostería tradicional española con los bollos y bollitos jugosos y rellenos, o el versátil buñuelo (de calabaza, de manzana, de nata o trufa…). Mención aparte merecen los churros y porras que están conquistando los mercados internacionales con paso firme. O los “sobaos” que despiertan recuerdos de fugaces y cálidas despedidas en el portal de casa. Pero nada como un buen “mantecado” que es capaz de arrancarnos del fondo del alma un prolongado “suspiro” (qué me decís de los de Pajares).


LAS GAMBAS CON CASHEW DE MIGUEL SHIAO

         Hoy vamos a cocinar un plato taiwanés del célebre Miguel Shiao. Pero antes vamos a conocer un  poco al personaje ya que su historia no tiene desperdicio. Miguel Shiao (Chi Luan Shiao), vino a España en agosto de 1956 merced a una beca de estudios que el régimen de Franco concedió por iniciativa del  ministro Martín Artajo, a  cincuenta estudiantes taiwaneses, sumándose así a la campaña internacional de apoyo a la China Nacionalista de Chiang Kai-Chek. Su aspecto no era el de un chino típico, ya que era alto espigado y atlético. Destacaba por su animosidad su inteligencia y su constancia en el trabajo y el estudio. Se instaló en el Colegio Mayor San Juan Evangelista de Madrid y cursó estudios de Filosofía y Letras, rama de Pedagogía. Cuando finalizó la carrera se encontró con que por motivos burocráticos no podía ejercer su profesión en España, pero esto no le hizo desistir en su empeño de salir adelante. Emprendedor inteligente y decidido, puso en marcha uno de los primeros restaurantes chinos de nuestro país en la calle de Leganitos en Madrid (El Restaurante Chino Pagoda),convirtiéndose en el primer importador de productos chinos que hubo en España al abrir su almacén en las galerías subterráneas de la Plaza de España. Con un ojo comercial insuperable, vio claramente que el futuro de la economía española pasaba por el turismo internacional y se trasladó a Benidorm donde inauguró el Bar Restaurante Chino “Pagoda” en la Torre Club Médico en la Avenida de Nicaragua. 

         Amigo del Rey D. Juan Carlos y de Felipe González, traductor e intérprete y experto en temas orientales, se empeñó en ser un divulgador entusiasta de su cultura y editó por su cuenta una serie de libros y manuales sobre cocina china, el mahjong, el horóscopo chino o los dichos tradicionales del confucionismo. Entre estas publicaciones se encuentra el “Recetario de Cocina China” que salió a la venta en 1976 por 125 pesetas y del que Enrique es orgulloso propietario desde aquellos lejanos tiempos. Tres años antes, Miguel había conseguido acogerse a la nacionalidad española y pudo viajar a su tierra y visitar a su familia dividida por la guerra. Miguel nos dejo en 1995 a consecuencia de un derrame cerebral. Como homenaje a esta extraordinaria persona, vamos a probar sus deliciosas Gambas con Cashew (anacardos). Que lo disfrutéis.


Ingredientes para 4 personas:

300 gramos de gambas grandes, peladas, lavadas y escurridas
100 gramos de cashew  (anacardos fritos)
2 cebolletas cortadas en juliana
2 rodajas de jengibre
3 tazas de aceite de cacahuete
1 clara de huevo
1 cucharada de maicena
1 vaso pequeño de vino blanco
1 cucharada de aceite de sésamo
Sal y pimienta

Preparación:

        Marinar las gambas con la clara de huevo, la maicena y un poco de sal, pimienta y el vino blanco durante media hora.

        Calentar el aceite de cacahuete. Cuando comience a hervir, saltear durante un minuto las cebolletas junto con las gambas. Reservarlas en un plato.

      Con el aceite sobrante salteamos el jengibre y añadimos un poco de vino blanco y las gambas junto a las cebolletas que habíamos reservado. Mezclamos bien los ingredientes.

        Antes de emplatar y servirlas, echamos las cashew fritas sobre las gambas y perfumamos con unas gotas de aceite de sésamo.


LAURA NYRO. WEDDING BELL BLUES

         
Laura Nyro es una de esas joyas ocultas con brillo y luz propia que en los sesenta y setenta quedaron eclipsadas por las grandes divas del rock, el pop y el folk, pero que son fundamentales para entender la evolución musical de esta época fecunda y convulsa. Mientras la carismática y tremenda Janis Joplin triunfaba (y desafinaba) en el Festival de Monterrey con los Big Brothers and the Holding Co., Laura Nyro tuvo que salir casi por la puerta trasera porque a los hippies no les gustaba su blues delicado y su voz sensitiva (y eso que era la novia de Jackson Browne). Pero Laura fue una gran intérprete que pasó a la historia como compositora de éxitos para otros cantantes y grupos. Seguro que todos conocéis muchas de sus canciones y las habéis disfrutado, cantado y bailado sin saber que se las debemos a ella y a su inmenso espíritu creativo. Princesa en la sombra del blues, del soul, del pop, del jazz, del rock. Así era Laura Nyro. The 5th Dimmension, los Blood Sweat and Tears -tras la marcha de Al Kooper fue postulada como posible lead singer-, Peter Paul and Mary, Barbra Streisand, Three Dog Night, LaBelle, y tantos y tantos otros. Curiosamente, uno de sus primeros éxitos (Up on the Roof) fue un tema de otra extraordinaria compositora (con mucha más popularidad y suerte que ella), Carole King. Ambas pertenecieron al famoso Brill Building (El Edificio de Ladrillos) en el 1619 de Broadway, donde se cocían desde los años 40 los mayores éxitos de la música popular americana. Por allí deambulaban Glenn Miller, Benny Goodman, o Jimmy Dorsey. Allí se gestaron todos los éxitos de Carole King y Gerry Goffin. Allí fue a parar Laura Nyro siendo una niña. Allí se gestó su primer disco First Songs (1967/1973).

     Sus discos “New York Tendaberry” (1969) y “Christmas and the Beads of Sweet” (1970), el directo de “Season of Lights” (1977. Rem.2008), o el recopilatorio "Collections" (1970), han pasado a la historia como fuentes de inspiración de musicos como Elton John, Tod Rundgren, Bette Midler, Steely Dan, Tori Amos o Cindy Lauper.

    Pero su historia no es un relato de brillo y oropel. Es una historia de respeto y consideración, de admiración y de reconocimiento tardío, cuando ya nada se podía hacer por ella. Pasó por muchas dificultades personales y económicas. Feminista, Bisexual. Acabo sus días junto a la pintora Maria Desiderio, falleciendo tristemente en 1996 de un cáncer de ovarios.

          Como es habitual, completamos la entrada con la exitosa versión de 5thDimmension, que consiguió llegar al número 1 del Billboard en agosto de 1969.





sábado, 6 de enero de 2018

TREES Y EL JARDÍN DE JANE DELAWNEY (1970)

Enrique y Elia


              El “Jardín de Jane Delawney” supuso el debut del grupo folkie-gótico Trees en 1970. La primera vez que escuché este tema, formaba parte del doble LP recopilatorio “Llena tu cabeza de Rock CBS (1970)”, grabación esclarecedora que para muchos/as chavales/as de los 70 fue como una auténtica aparición mariana que nos permitió conocer a gente como Laura Nyro o al indigente friki de Louis Hardin (Moondog), o a grupos esenciales como The Flock (Jerry Goodman), Spirit (Randy California), Black Widow, etc.

         Entre todos ellos destacaban los Trees. Con los años conseguimos hacernos con los dos únicos discos de estudio que tienen publicados: “The Garden of Jane Delawney (1970)” y “On the Shore (1971)”. Arreglos casi perfectos del productor Bias Boshell y la escalofriante voz de Celia Humphris, temas inquietantes, canciones de fantasmas y aparecidos (haunting songs), acordes folkies y arreglos psicoprogresivos sobre temas tradicionales. Trees es un grupo de difícil clasificación ya que podríamos estar hablando del lado oscuro de Fotherengay (Fairport Convention) o de Steeleye Span y en esta ecuación, Celia Humphris sería la hermana gótica de Sandy Denny o de Maddy Prior. Una flipada. Para que pilléis onda os adjuntamos la letra de la canción con una traducción de la tita Eli.


            P.D.: De todos los innumerables covers que existen en la red de esta canción, Enrique y yo hemos tenido nuestros más y nuestros menos. Como él es muy pijo,  prefería la versión raruna de la banda de las Islas Feroe Ygsdrassil y yo, la más normalita de los franchutes Dark Sanctuary. Al final ha prevalecido mi criterio que para eso el blog es mío, jejeje. Que las disfrutéis.


TREES

DARK SANCTUARY

WILLIAM BLAKE (1757-1827)


William Blake: 

Poeta visionario y Maestro grabador



UN ARBOL VENENOSO

Estaba enojado con mi amigo:
le manifesté mi ira, la ira terminó.
Estaba enojado con mi enemigo:
me quedé callado, y mi ira aumentó.

En el miedo la fui regando,
de noche y de día con mis lágrimas;
con sonrisas la fui asoleando,
y con sutiles y arteras estratagemas.

Así creció de día y de noche,
hasta volverse una brillante manzana;
y mi enemigo observó su brillo,
y supo que era mía,

y furtivo entró a mi jardín
cuando la noche envolvió al follaje.
Por la mañana satisfecho vi
a mi enemigo exánime bajo el árbol.

De Canciones de Inocencia y Experiencia

 


LA ROSA ENFERMA

Estás enferma, ¡oh rosa!
El gusano invisible,
que vuela, por la noche,
en el aullar del viento,

tu lecho descubrió
de alegría escarlata,
y su amor sombrío y secreto
consume tu vida.


De Canciones de Inocencia y Experiencia




ETERNIDAD

Quien a sí encadenare una alegría
malogrará la vida alada.
Pero quien la alegría besare en su aleteo
vive en el alba de la eternidad.

(Trad. Marie Montand)